Si estás tratando de ahorrar unos cuantos dólares durante la pandemia, es posible que hayas pensado en empezar tu propio jardín para reducir el coste de tu cesta de la compra. La jardinería puede ser una buena actividad en tiempos de pandemia. Es relajante, te saca de la casa por un tiempo, y si te han dado permiso, tendrás mucho tiempo para arrancar las malas hierbas. Y sí, cultivar tu propia comida puede definitivamente ahorrarte dinero en comestibles, si se hace de la manera correcta. Usa las siguientes estrategias para asegurarte de que tu jardín no se convierta inadvertidamente en un pozo de dinero.
Haz tu propio abono.
El suelo de tu jardín es parte integral de su éxito. Las plantas necesitan un suelo rico en nutrientes para desarrollarse adecuadamente. Desafortunadamente, si vives en un área donde el suelo es naturalmente pobre, podrías gastar una fortuna en enmiendas de suelo. Puedes superar este obstáculo comenzando tu propia pila de abono.
Notará que algunos contenedores de abono disponibles en el mercado son bastante caros. Tampoco son necesarios. Si tienes algunos bloques de hormigón, puedes apilarlos para crear tu propio contenedor de abono. O, simplemente usa una pila independiente en una esquina de tu patio. Lo ideal es que la pila consista en un 80% de carbono (material seco y marrón como hojas, aserrín y recortes de hierba) y un 20% de nitrógeno (plantas verdes y restos de comida como cáscaras de huevo).
Empieza con las semillas.
Cuando empiece a revisar sus opciones, notará que puede comprar semillas o plántulas jóvenes. Comprar pimientos, tomates u otras plántulas costará más que comprar unos cuantos paquetes de semillas. Sin embargo, tenga en cuenta que algunos paquetes de semillas cuestan más que otros. Las variedades orgánicas siempre son más caras. Puede reducir sus gastos en semillas optando por variedades no orgánicas. Tenga en cuenta también que algunas semillas son para variedades híbridas. Si planeas guardar las semillas de las plantas maduras para sembrarlas el próximo año, tendrás que elegir las no híbridas.
Como puedes ver, la jardinería puede ser tan cara o tan barata como la hagas. Tomando algunos atajos, puedes reducir tus costos de inicio y aún así hacer tu jardín productivo. En unos pocos meses, estarás cosechando alimentos frescos y recortando la cuenta de la tienda de comestibles.